En el ámbito de la edificación off-site, los términos casa prefabricada y casa industrializada suelen emplearse indistintamente. Sin embargo, según el contexto técnico y el enfoque constructivo aplicado en España, existen matices que conviene aclarar para entender mejor su alcance y su aportación frente a la construcción tradicional.
¿Qué es una Vivienda Industrializada?
La vivienda industrializada es aquella cuyo sistema constructivo se basa en procesos controlados, repetibles y optimizados, donde gran parte de la producción se realiza fuera del emplazamiento final. Incluye un diseño estructural preciso, componentes fabricados con tolerancias ajustadas y métodos de ensamblaje que garantizan calidad, rapidez y seguridad en la ejecución.
En sistemas como Starmodul, la vivienda industrializada se caracteriza por estructuras metálicas atornilladas, sin soldadura, que permiten una alta precisión y una ejecución limpia, segura y estandarizada.
¿Y qué entendemos por Casa Prefabricada?
El término casa prefabricada suele referirse a cualquier edificación cuyas partes se producen previamente en fábrica y luego se trasladan a obra para su montaje. Puede abarcar desde módulos volumétricos completos hasta paneles, bastidores o componentes estructurales.
En la práctica, una casa prefabricada es un subconjunto dentro de la industrialización: es prefabricada cuando los elementos se producen previamente, pero no necesariamente sigue un proceso integral industrializado como el que requieren los sistemas más avanzados.
Diferencias entre Casa Prefabricada e Industrializada (según uso técnico en el mercado)
Aunque ambos conceptos comparten una base común —la fabricación off-site—, las diferencias suelen encontrarse en el nivel de estandarización y precisión del proceso:
- Grado de industrialización:
- Industrializada: responde a un proceso completo, planificado y repetible, con ingeniería detallada y control de calidad constante.
- Prefabricada: implica fabricación previa, pero no siempre un proceso integral industrializado.
- Flexibilidad de diseño:
- Los sistemas industrializados permiten adaptaciones arquitectónicas más amplias, manteniendo precisión estructural.
- La prefabricación puede ser más dependiente de formatos preestablecidos según proveedor.
- Componentes y ensamblaje:
- Los sistemas industrializados utilizan elementos optimizados para montaje rápido y controlado (como las uniones atornilladas de Starmodul).
- La prefabricación puede combinar componentes industrializados con otros tradicionales.
En muchos proyectos, especialmente residenciales, ambos términos llegan a solaparse, ya que describen soluciones más eficientes y avanzadas que la construcción convencional.
Puntos en Común: Ventajas Compartidas de la Construcción Off-Site
Tanto en viviendas prefabricadas como en industrializadas, el denominador común es la optimización del proceso constructivo. Entre las principales ventajas destacan:
- Reducción de plazos gracias al montaje rápido.
- Mayor control de calidad al trabajarse en fábrica.
- Minimización de residuos y mayor eficiencia en materiales.
- Mayor predictibilidad en costes y planificación.
- Mejora del comportamiento térmico y funcional, especialmente cuando se integra panel sándwich y sistemas estructurales metálicos optimizados.
Conclusión
En esencia, ambos conceptos apuntan hacia una nueva forma de construir: más precisa, más eficiente y más controlada que la construcción tradicional. La diferencia radica en el grado de industrialización del proceso y la tecnología aplicada.
En sistemas como Starmodul, la vivienda industrializada se entiende como un proceso completo, estandarizado y altamente optimizado que integra diseño, ingeniería y montaje para ofrecer un resultado final de máxima calidad.